.:: ¿Qué es la juventud? ::.
¿Crees que eres joven?
"Me siento joven" o "soy joven". Son términos que aunque parezca que se relacionan entre sí indican etapas muy diferentes y marcadas en la vida.
El ser joven tiene una fecha de caducidad, un principio y un fin. No se puede ser joven de por vida, tenemos expresiones como "Aprovecha tu juventud", "Juventud divino tesoro"... que nos confirman que es un período limitado en el que debemos de ajustar nuestras prioridades o tener claro lo que queremos hacer, debemos de tener un rumbo fijo, pues seguiremos un período extenso y largo de desgaste fisico que traerá consigo la inexistencia.
Por el contrario, tenemos el hecho de "sentirse joven" que apunta a algo que no se ve, pero se nota o se "siente". El sentirse joven envuelve los sentimientos, por lo tanto es una expresión nacida en la parte más profunda de nuestra ser, de nuestro "yo" interior, que llega a entrelazarse o armonizar con nuestro ánimo lúdico y nuestro espiritu, hasta el punto de llegar a notarse al interaccionar con otros, en nuestra forma de actuar e incluso en la toma de decisiones.
Este término, en cambio, no implica un desgaste físico puesto que es la persona interior la que rejuvenece, no implica un desgaste prolongado puesto que es un sentimiento o una manera de sentirse e incluso de pensar que no tiene período limitado puesto que somos nosotros mismos los que ponemos punto y final a ese estado por factores agresivos externos como puede ser mala salud, un entorno hostil debido a fallecimiento de seres muy queridos, problemas familiares u otras causas que pueden arrebatarnos tal sentimiento y digo "puede", puesto que es nuestra voluntad la que permite alimentar tal sentimiento o por el contrario, ponerle fin.
Es curioso que desde el momento que en la niñez empezamos a hablar y comunicarnos, tanto leguaje verbal como no verbal, admiramos a los mayores y queremos ser mayores, imitamos a los adultos en todo, tanto si son buenas como malas costumbres, queremos crecer, ser maduros (nos ponemos años e intentamos aparentar más edad de la que tenemos), y este sentimiento nos va a acompañar toda nuestra juventud; el deseo de ser muy maduros, de aconsejar a los de nuestra edad e incluso atrevernos a aconsejar a los que nos aventajan en edad (la edad no es sinonimo de experiencia y puede ser que nuestra madurez vaya más adelantada), es normal en ese período en el que queremos ser adultos y que se nos trate como tal.
Sin embargo, cuando alcanzamos dicho objetivo que durante toda nuestra juventud nos ha acompañado, es como si nos desengañáramos al obtenerlo y nos pasamos el resto de la etapa siguiente que abarca este período hasta rozar la ancianidad quitándonos años y envidiando a la juventud de generaciones posteriores.
No obstante, aunque el ser joven es algo vano que no durará siempre, el sentirse joven es un sentimiento que no todos saben conservar y ni siquiera desarrollar. Aunque sea un término algo atrevido sí puede considerarse a una persona interiormente anciana o vieja independientemente de su edad sea 16, 20, 24 o 52. Una persona que por edad física sea joven (pongamos por ejemplo: 21 años) perfectamente puede encajar en este perfil si constamente vive recordando su época dorada (supongamos que fue a los 17); para entender el ejemplo anterior tenemos a Camilo Sexto que vive de los recuerdos de su época dorada; por el contrario, una persona con 70 años puede sentirse joven si no vive de recuerdos o encerrada en su pasado, sino utilizando el presente como moneda de cambio al futuro.
Por lo tanto, la juventud no es un tiempo de la vida, es un estado del espíritu
"Me siento joven" o "soy joven". Son términos que aunque parezca que se relacionan entre sí indican etapas muy diferentes y marcadas en la vida.
El ser joven tiene una fecha de caducidad, un principio y un fin. No se puede ser joven de por vida, tenemos expresiones como "Aprovecha tu juventud", "Juventud divino tesoro"... que nos confirman que es un período limitado en el que debemos de ajustar nuestras prioridades o tener claro lo que queremos hacer, debemos de tener un rumbo fijo, pues seguiremos un período extenso y largo de desgaste fisico que traerá consigo la inexistencia.
Por el contrario, tenemos el hecho de "sentirse joven" que apunta a algo que no se ve, pero se nota o se "siente". El sentirse joven envuelve los sentimientos, por lo tanto es una expresión nacida en la parte más profunda de nuestra ser, de nuestro "yo" interior, que llega a entrelazarse o armonizar con nuestro ánimo lúdico y nuestro espiritu, hasta el punto de llegar a notarse al interaccionar con otros, en nuestra forma de actuar e incluso en la toma de decisiones.
Este término, en cambio, no implica un desgaste físico puesto que es la persona interior la que rejuvenece, no implica un desgaste prolongado puesto que es un sentimiento o una manera de sentirse e incluso de pensar que no tiene período limitado puesto que somos nosotros mismos los que ponemos punto y final a ese estado por factores agresivos externos como puede ser mala salud, un entorno hostil debido a fallecimiento de seres muy queridos, problemas familiares u otras causas que pueden arrebatarnos tal sentimiento y digo "puede", puesto que es nuestra voluntad la que permite alimentar tal sentimiento o por el contrario, ponerle fin.
Es curioso que desde el momento que en la niñez empezamos a hablar y comunicarnos, tanto leguaje verbal como no verbal, admiramos a los mayores y queremos ser mayores, imitamos a los adultos en todo, tanto si son buenas como malas costumbres, queremos crecer, ser maduros (nos ponemos años e intentamos aparentar más edad de la que tenemos), y este sentimiento nos va a acompañar toda nuestra juventud; el deseo de ser muy maduros, de aconsejar a los de nuestra edad e incluso atrevernos a aconsejar a los que nos aventajan en edad (la edad no es sinonimo de experiencia y puede ser que nuestra madurez vaya más adelantada), es normal en ese período en el que queremos ser adultos y que se nos trate como tal.
Sin embargo, cuando alcanzamos dicho objetivo que durante toda nuestra juventud nos ha acompañado, es como si nos desengañáramos al obtenerlo y nos pasamos el resto de la etapa siguiente que abarca este período hasta rozar la ancianidad quitándonos años y envidiando a la juventud de generaciones posteriores.
No obstante, aunque el ser joven es algo vano que no durará siempre, el sentirse joven es un sentimiento que no todos saben conservar y ni siquiera desarrollar. Aunque sea un término algo atrevido sí puede considerarse a una persona interiormente anciana o vieja independientemente de su edad sea 16, 20, 24 o 52. Una persona que por edad física sea joven (pongamos por ejemplo: 21 años) perfectamente puede encajar en este perfil si constamente vive recordando su época dorada (supongamos que fue a los 17); para entender el ejemplo anterior tenemos a Camilo Sexto que vive de los recuerdos de su época dorada; por el contrario, una persona con 70 años puede sentirse joven si no vive de recuerdos o encerrada en su pasado, sino utilizando el presente como moneda de cambio al futuro.
Por lo tanto, la juventud no es un tiempo de la vida, es un estado del espíritu
10 comentarios
Lilhly -
Un besito pa todos.
Estronque -
Y DALE Q TE PEGO CON EL "ESPLICO" (y con los duplicados) -
Lihly con un cuarto de siglo y pico -
Lo que sí es cierto es... que el humano no esta hecho para envejecer ya que es un rasgo de la imperfeccion, así igualmente la persona "vieja" interiormente lo es por imperfeccion tambien.
Y, por cierto, creo que este articulo lo has escrito por tambien hay algo que ronda tu mente con respecto a esto jajajaja, tal vez tu seas un "viejo prematuro" jajajaj (es broma chavalin)
Un besito caoba
Raquel -
Natalia -
Jajajaja :P
cÁRDENAs -
xD
Raquel -
Lihly -
(otro dia entro para dejar un comentario sobre el articulo, es que hoy ya no me da tiempo)
maijo -
yo misma que cuando pienso o me preguntan la edad "......."" jajaja digo "jooooo que vieja""" sin embargo muchas personas me dicen que se piensan que tengo menos edad ...y supongo que es por las venas de loca que me dan...no se supongo que pq realmente nunca pienso la edad que tengo...si me apetece hacer el tonto pues...(segun con quien este)...lo hago...jajajaj...
espero llegar a es una viejecita pero sin dejar de reirme, decir tonterias y disfrutar con simples cosas....
pd..bonito articulo cardenas...un besooo